Mis 5 pequeños logros diarios

IMPORTANTE: Esta entrada pertenece a mis inicios cuando explicaba cómo hice para ayudar a emprendedores a crear su negocio online relatando cómo lo hacía yo. Ahora no está alineada con el objetivo de esta página pero quise mantenerla porque incluye contenido de calidad que puede que te ayude en algo.

Dicen que la vida es un cúmulo de pequeños sacrificios, necesarios para poder ir avanzando. No estoy seguro de que esa afirmación sea la correcta, pero oye, ahí está.

Según mi punto de vista son pequeñas decisiones que vas tomando día a día, con ese afán de que en un futuro a corto o a largo plazo tu vida sea un poquito mejor. ¿Te has parado a pensarlo alguna vez? Yo constantemente.

Hoy quiero compartir contigo mis pequeños logros diarios para sacar adelante DanielBarcelona.com y que te ayuden a motivarte a ti también; porque ese es el objetivo de que yo escriba, ¿cierto?

1. Me levanto cada día a las 6

¿A las 6? ¿Pero estás loco?

¡Bueno bueno! No te voy a decir que no me cueste algunos días, como a cualquier otra persona, pero si, eso es, ya he conseguido crearme el hábito; he descubierto el truco infalible para poder hacerlo: acostarme más temprano. Así de simple.

A veces nos obcecamos en resolver problemas simples con soluciones complejas, y nada más lejos de la realidad. Tu cuerpo debe descansar diariamente, y no hay otra manera de asegurarte el éxito en esto, si quieres levantarte temprano, planifica el día anterior para poder irte a la cama antes.

Yo, como tú, me hice el propósito de aprovechar más el tiempo del día y ganarle horas al reloj, pero son 24 horas: en Barcelona, en Nueva York o en Pekín. Tras probar diferentes recetas opté por rendirme a la evidencia, y procurar dormir 8 horas cuando puedo, y si no llego a ellas, pues que sean 7. El que algo quiere, algo le cuesta, ¿verdad?

El motivo de levantarme temprano es que si tengo un trabajo por cuenta ajena, quiero disfrutar de mi esposa, tener alguna afición, mantener relaciones sociales y levantar DB (DanielBarcelona.com) debo desearlo tan fuerte que no me cueste levantarme cuando suene el despertador.

2. Me enfoco en escribir, y nada más

Me encanta poder decir que he sido exitoso en esto también. En mis emprendimientos anteriores he cometido los típicos errores de todo recién llegado a esto de los negocios digitales: que si la página debe estar impecable, preciosísima y detallada al máximo, que si debo estar en todas las redes sociales que te puedas imaginar y publicar millones de actualizaciones para enganchar a mi audiencia, que si debo leer a diario 50 blogs para estar a la última en herramientas de captación…

Nada.

Mi meta a diario es aprovechar el escaso tiempo que dispongo para escribir. Punto. Diseñar, planificar y ofrecer contenido de calidad para que las personas que quieran acompañarme en este camino estén satisfechas de no haber perdido el tiempo leyendo cada una de mis entradas, y que aporten VALOR.
Ese es el punto clave: las cosas tienen un costo, y tiene un valor. Y habitualmente no están a la par.

¿Cuántas veces has comprado algo que costaba un riñón y luego no valía la pena? ¿O que has obtenido una experiencia invaluable a costo irrisorio?

De eso se trata: hoy leerme tan sólo te cuesta tiempo, y tú me dices en los comentarios cuánto valor le sacas.

3. Mido el tiempo que utilizo

No tiene sentido para mí sentarme en mi lugar favorito a escribir y no saber si realmente estoy rindiendo de forma adecuada. Ese es otro de mis retos, ser capaz de saber cuánto tiempo le dedico a DB cada semana, o cada mes.

Además tiene un efecto secundario que no había pensado hasta que me he puesto a hacerlo: como cada día me reto a mi mismo a invertir menos tiempo y luchar contra el reloj, soy incapaz de perder el tiempo sin querer consultando el email, o caer en el maldito bucle de Youtube… tanto es así que con la intención de enfocarme al 100% ya escribo sin conexión a internet. Más enfoque, más productividad.

Para tal menester utilizo una herramienta para mí increíble: se llama Toggl (toggl.com) y me permite medir el tiempo que dedico a cualquier proyecto que yo quiera. Hay personas que miden todo el tiempo que pasan delante del ordenador, aunque yo prefiero dedicarlo exclusivamente a medir los ratos de DB. Si estimo que cada semana debo dedicarle 15 o 20 horas a DB, con esta herramienta sé si voy bien o debo aplicarme un poco más.

He probado alguna otra herramienta, pero de ésta me ha convencido que puedo iniciar el tiempo sin la necesidad de ponerle antes a qué lo voy a dedicar (cuando comienzo quiero hacerlo cuanto antes, ya lo catalogaré después cuando haya terminado) y que es multiplataforma: puedo descargar la aplicación en mi Mac y medir mi tiempo, y en mi iPhone para trabajar en movilidad en cualquier momentito.

4. Huyo de la procrastinación (redes sociales esencialmente)

No hay mayor ladrón de tiempo que las redes sociales. Cuanto antes lo asumas, antes escaparás de sus tentáculos. Me he llegado a ver en el pasado perdiendo el tiempo 2 horas seguidas leyendo chorradas que no me aportan nada:

  • ¿Sabías que en un pueblo del interior de Brasil han encontrado a una pitón de casi 50 centímetros de grosor?
  • ¿Eres consciente de que Trump ha vuelto a desacreditar a un medio de comunicación?
  • ¡Guau! Qué vestido más bonito se ha puesto la tía Enriqueta (a la que no has visto en los últimos 15 años) para cenar hoy…

Se acabó. Y te recomiendo hacer lo mismo. Mi tiempo para redes sociales está limitado a unos 10 minutos diarios en total. Y debería decir red social en singular, ya que tan solo visito Twitter unos minutos, y si acaso 30 segundos más a Instagram.

Te lanzo un reto: mide el tiempo que pasas tú en redes sociales; cuenta los ratitos muertos que consultas Facebook en el móvil, ese poquito de Instagram cada vez que te llega una notificación (que ya hablaremos de las notificaciones en otro momento) o ese momentito después de comer… si bajas de 1 hora diaria date por satisfecho. 1 hora cada día. Plantéatelo.

5. Planifico mi vida para que me dé tiempo a todo

La de veces que he pensado en el pasado… ¿pero qué he hecho hoy? ¡si no me ha dado tiempo a nada y tampoco he hecho nada en especial!

Si te ha pasado como a mí, te entiendo perfectamente. Días y días de procrastinación encubierta y ¡zas!, se acabó el día y sientes remordimientos de no haber hecho todo lo que te hubiera gustado.

Pero tengo la solución que a mí me ha funcionado: planificar el día la noche anterior.

No te creas que tengo que dedicarle muchísimo tiempo: unos minutos antes de dormir, o incluso antes de cenar son suficientes para saber qué debo hacer a las 6 AM al levantarme. Hoy por ejemplo estoy acabando este escrito para que lo puedas leer mañana por la mañana (recuerda que yo vivo actualmente 7 horas en el pasado respecto a España). Y luego desayuno con mi mujer, leo un poquito un libro que tengo a medias, me ducho y me voy a mi otro trabajo a eso de las 9 AM.

¡Listo!

De otra forma, posiblemente me levantaría a las 8:30 AM maldiciendo el despertador, me ducharía en 10 minutos, desayunaría a la carrera y me iría a trabajar. Y otro día sin escribir.

¿Y tú, qué opción prefieres?

Elige tu camino

Estos son algunas de las acciones de las que estoy orgulloso a diario, me reconforta saber que soy capaz de llevarlas a cabo y me animan a seguir adelante, un pasito detrás de otro. Es un subidón sentirte realizado y disfrutar cuando cumples tus obejtivos.

Tú no tienes porqué tener las mismas acciones, muy probablemente tienes logros distintos a los míos. ¿Te apetece compartirlos con los demás?


Solo Si te ha gustado lo que has leído y te interesan las finanzas personales

Cada domingo envío por correo ideas, lecturas, y enlaces interesantes sobre el manejo de la economía personal y familiar.
Únete si lo deseas. Es gratis.

13 comentarios en «Mis 5 pequeños logros diarios»

  1. Montse, ¡me ruborizas! Yo nunca diré que organizarse y conseguir cosas es fácil… porque no lo es, sino todo el mundo lo haría, ¿no? 😉
    La autoayuda en si es algo en lo que no creo, no por escuchar o leer palabras bonitas vas a ser mejor, pero si creo en ser autodidacta, también en los aspectos anímicos o de crecimiento personal… parece lo mismo, pero no lo es.
    ¡Un día tengo que contaros mis referentes literarios! El libro del mago More no está nada mal 🙂
    Gracias Montse

  2. ¡Hola Gabo!

    Te entiendo perfectamente, lo que pasa es que el cuerpo es sabio, y se protege continuamente 😉 un día desarrollaré este tema, ya verás.
    El consejo que te puedo dar es algo que me funcionó en su momento:
    «Si quieres levantarte una hora antes, acuéstate una hora antes». Y añadiría: entonces será más sencillo tener fuerza de voluntad.

    Suerte con tus madrugones a partir de ahora, ¡y los de tu chica!

  3. ¡Gracias Ana!
    En ocasiones estamos tan sumidos en la vida de los otros que no nos acordamos de vivir la nuestra, y de pensar en los objetivos que tenemos.
    Siempre digo que las redes sociales no son malas, somos nosotros que no las usamos de la manera adecuada 😉

  4. Eso mismo Fabi, tienes toda la razón.
    Dice la definición de ‘disciplina’ en la RAE: «Conjunto de reglas o normas cuyo cumplimiento de manera constante conducen a cierto resultado.»
    En realidad es el principio de todo, si tienes disciplina generas un hábito, y con el hábito generas resultados.
    Eso si, como bien dices… ¡no significa que sea fácil! 🙂

  5. Al igual que tú, últimamente he leído muchos libros de estos calificados como autoayuda, uno de ellos el del mago More (que te recomiendo muchísimo) y muchos artículos de cómo gestionar tu tiempo etc… todos ellos coinciden en lo que dices de organizarte y despertarte antes. Y lo cierto es que realmente funciona tener tu tiempo e irte a dormir con la satisfacción de que has hecho lo que debes. Las redes sociales me matan, literalmente, son una droga que roban mi tiempo, para ello me instalé una app «Life Cycle» que debería chequear más a menudo pero no lo hago por miedo a descubrir «el vicio»

    Eres toda una inspiración, leerte da fuerzas para pensar «yo también puedo» y «yo tb debo»

    Muchas gracias Mem!!!!

  6. Me es tan imposible pararme temprano. Suena la alarma y me levanto a apagarla, pero en automático regreso a la cama. Y suena cada 5 minutos (y cada 5 minutos la apago) hasta que yo o mi chica nos hartamos y nos paramos corriendo para terminar desayunando cereal o algo y salir corriendo a Santa Fe. Y cuando regresamos en la noche y nos acostamos, nos prometemos que mañana sí nos despertaremos temprano y prepararemos el desayuno y nos sentaremos a desayunar juntos, tendremos un poco de tiempo para nosotros y luego saldremos sin manejar como locos al trabajo. Pero suena la alarma y la historia de repite. Hemos tratado de averiguar que sucede, sin éxito hasta ahora.

  7. Redes sociales menos. Alguna vez pensé en la sarta de tonterías con que perdemos el tiempo «los príncipes de X jugando con su hijo» ?

    Hacer mi plan en la noche para el día siguiente me ayuda mucho. ?

    Seguiré tus consejos.

  8. Gracias por comentar Pedro,

    El tema es que las redes sociales debían ser usadas para tener contacto con las demás de forma que se optimizaran las habilidades sociales entre ellos; hoy en día son plataformas de publicidad encubierta y pérdida de tiempo con vídeos sensacionalistas.

    El otro día vi como una chica, al aterrizar el avión, estaba consultando su Facebook a un ritmo de entre 10 y 12 publicaciones por segundo. Su pulgar había desarrollado el gesto de bajar la pantalla hasta unos límites inauditos.

    Veremos como evoluciona todo esto, pero no creo que sea para bien. Igualmente yo voy a lo mío y no me arrastra esa corriente.

  9. El tema de las redes sociales es ciertamente un gran problema. Es complicado gestionarlas de forma productiva. Por mucho que las sanees de contactos tóxicos siempre hay algún momento en los que no sólo te hacen perder productividad sino que también generan enfados innecesarios, desmotivación, dudas y mucho más que no resulta positivo. Sin contar lo complicado que resulta usarlas para mantener una conversación enriquecedora.

Los comentarios están cerrados.